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domingo, 21 de febrero de 2010

El saco de carbón

Un día, Jaimito entró a su casa dando patadas en el suelo y gritando muy molesto.
Su padre, lo llamó. Jaimito, lo siguió, diciendo en forma irritada:

- Papá, ¡Te juro que tengo mucha rabia! Pedrito no debió hacer lo que hizo conmigo.
Por eso, le deseo todo el mal del mundo, ¡Tengo ganas de matarlo!

Su padre, un hombre simple, pero lleno de sabiduría, escuchaba con calma al hijo quien continuaba diciendo:

- Imagínate que el estúpido de Pedrito me humilló frente a mis amigos. ¡No acepto eso!
Me gustaría que él se enfermara para que no pudiera ir más a la escuela.

El padre siguió escuchando y se dirigió hacia una esquina del garaje de la casa, de donde
tomó un saco lleno de carbón el cual llevó hasta el final del jardín y le propuso:

- ¿Ves aquella camisa blanca que está en el tendedero? Hazte la idea de que es Pedrito y cada pedazo de carbón que hay en esta bolsa es un mal pensamiento que va dirigido a él. Tírale todo el carbón que hay en el saco, hasta el último pedazo. Después yo regreso para ver como quedó.

El niño lo tomó como un juego y comenzó a lanzar los carbones pero como el tendedero estaba lejos, pocos de ellos acertaron la camisa.

Cuando, el padre regresó y le preguntó:

- Hijo ¿Qué tal te sientes?

- Cansado pero alegre. Acerté algunos pedazos de carbón a la camisa.

El padre tomó al niño de la mano y le dijo:
- Ven conmigo quiero mostrarte algo.

Lo colocó frente a un espejo que le permite ver todo su cuerpo.... ¡Qué susto!
Estaba todo negro y sólo se le veían los dientes y los ojos. En ese momento el padre dijo:

- Hijo, como pudiste observar la camisa quedó un poco sucia pero no es comparable a lo sucio que quedaste tú. El mal que deseamos a otros se nos devuelve y multiplica en nosotros. Por más que queremos o podamos perturbar la vida de alguien con nuestros pensamientos, los residuos y la suciedad siempre queda en nosotros mismos.


Ten mucho cuidado con tus pensamientos porque ellos se transforman en palabras.
Ten mucho cuidado con tus palabras porque ellas se transforman en acciones.
Ten mucho cuidado con tus acciones porque ellas se transforman en hábitos.
Ten mucho cuidado con tus hábitos porque ellos moldean tu carácter.
Y ten mucho cuidado con tu carácter porque de él dependerá tu destino.

anónimo

la renovaciòn del aguila

El águila , es el ave que posee la mayor longevidad de su especie.

Llega a vivir 70 años.

Pero para llegar a esa edad ,a los 40 años de vida tiene que tomar una seria decisión.

A los 40 años:

Sus uñas curvas y flexibles , no consiguen agarrar a las presas de las que se alimenta.

Su pico alargado y punteagudo , también se curva.

Apuntando contra el pecho están las alas , envejecidas y pesadas por las gruesas plumas.

¡ Volar es ahora muy difícil !

Entonces el águila , tiene sólo dos alternativas: Morir , ..... ó enfrentar un doloroso proceso de renovación que durará 150 días.

Ese proceso consiste en volar hacia lo alto de una montaña y refugiarse en un nido, próximo a una pared , donde no necesite volar.

Entonces, apenas encuentra ese lugar , el águila comienza a golpear con su pico la pared , hasta conseguir arrancárselo.

Apenas lo arranca , debe esperar a que nazca un nuevo pico con el cual después , va a arrancar sus viejas uñas.

Cuando las nuevas uñas comienzan a nacer, prosigue arrancando sus viejas plumas.

Y después de cinco meses , sale victorioso para su famoso vuelo de renovación y de revivir, y entonces dispone de 30 años más.

A veces nos preguntamos:

¿ Por qué renovarnos ?

En nuestra vida, muchas veces, tenemos que resguardarnos por algún tiempo y comenzar un proceso de renovación.

Para que reanudemos un vuelo victorioso, nos devemos desprender de apegos, ataduras , costumbres y no solamente material tambiém de índole sentimental y otras tradiciones del pasado.

Solamente libres del peso del pasado , podremos aprovechar el valioso resultado de una renovación.

NACIMOS PARA VOLAR COMO LAS AGUILAS, Y NO PARA ARRASTRARNOS COMO GUSANOS, muchas veces en una relación creemos que para conservar a esa persona a nuestro lado debemos arrastrarnos como gusanos, y en vez de amor conseguimos despertar lastima, por eso debemos renovarnos y cambiar, la ironía por el amor, el orgullo por la humildad, la impaciencia por la calma, la guerra por la paz.