En el silencio de tu alma se esconden los más bellos secretos de tu corazón.
El silencio no es la ausencia de sonidos, es un estado tranquilo en el que puedes oír lo que se mueve en tu interior con mayor claridad
En silencio se descubren maravillosas conversaciones que la palabra sería incapaz de pronunciar.
En el trabajo callado y tranquilo los dones de las personas se hacen visibles.
La palabra, cuando es clara y sincera, nos acerca a los demás, nos ayuda a darnos a conocer, nos muestra lo que los demás piensan y viven… el silencio es el mayor grado de comunicación que podemos conseguir con un ser humano.
Ábreme el cofre sagrado de tu silencio, comparte conmigo desde lo que eres, desde lo que vives, desde lo que lloras y desde donde te alegras…
sin palabras.
Entraré de puntillas, sin hacer ruido, para no romper la hermosura que me ofreces a través de tu silencio...
El silencio es el mayor grado de comunicación.
Conclusión: Muchas veces debemos utilizar este estado para, sincerarnos, meditar, pensar, y escucharnos a nosotros mismos porque es en ese silencio donde nos damos cuenta quiénes somos y para donde estamos guiando nuestros pasos y si es necesario corregirlos y así tratar de entender un poco la vida que estamos llevando y la cual estamos compartiendo con las personas que nos rodean y con las cuales compartimos a diario, sea en nuestro trabajo o en nuestro hogar, también el silencio nos ayuda a ser justos en nuestros actos y a no juzgar sin escuchar, el silencio solo es una oportunidad de dialogar con nosotros mismos, anreur.
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